Boletines

02-10-2017

Participa rector de la UAEM en la marcha  por los 49 años de la masacre de Tlatelolco

BOLETIN DE PRENSA

Boletín No. 1925

Ciudad Universitaria, 2 de octubre de 2017.

 

 

El rector de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Jesús Alejandro Vera Jiménez, participó este día en la desplegada de la marcha para conmemorar los 49 años de la Masacre Estudiantil y Popular de 1968, y luego fue uno de los oradores del mitin en la Plaza de la Constitución, zócalo de la Ciudad de México.

Junto a los líderes históricos del Consejo Nacional de Huelga del Movimiento Estudiantil de 1968, el rector partió de la Plaza de las Tres Culturas al frente de unas 35 mil personas, rumbo al zócalo de la Ciudad de México. La manta de la desplegada se convirtió en un llamado a la “reconstrucción nacional con dignidad y soberanía”.

Al llegar al mitin, Vera Jiménez hizo uso de la palabra. En 49 años, dijo, México ha avanzado, “pero en otros la degradación y decadencia se han profundizado”. Hizo un llamado a la solidaridad con la UAEM, que “está siendo golpeada de manera inmisericorde por el gobernador Graco Ramírez Garrido Abreu, quien, utilizando prácticas del peor y más burdo de los autoritarismos, le tiene retenido el subsidio y los fondos que le pertenecen, y persigue políticamente a su rector”.

Aseguró que es claro que “Graco quiere apropiarse de la universidad de cara a las elecciones del 2018 y destruir su autonomía, una autonomía que permitió a los estudiantes del 68 enfrentar los poderes de su tiempo y heredarnos la dignidad con la que hoy los jóvenes enfrentan el desastre de la nación. No permitamos que Graco y quienes hoy atacan a la universidad pública destruyan los valores más altos de la vida universitaria. Sería una atrocidad”. 

Antes, había afirmado que “el movimiento estudiantil del 68 popularizó en su momento conceptos tales como libertad, autonomía, democracia y justicia, y las hizo sus consignas. Hoy, 49 años después, seguimos movilizándonos a partir de ellas porque aún no hemos logrado que sean realmente el entramado de nuestra convivencia”.

Ello es consecuencia de que en 49 años, “México y los mexicanos no hemos logrado hacerle frente a la desigualdad, a la impunidad y a la corrupción; antes, al contrario, hoy son muchas las evidencias de que la desigualdad, la impunidad y la corrupción, cual enfermedades crónico degenerativas, se han engullido al Estado”. 

Y justo en la coyuntura del sismo del pasado 19 de septiembre, “los jóvenes mexicanos volvieron a tomar las calles y grandes porciones del territorio nacional con gran generosidad, es momento de que nos sumemos a ellos y hagamos de las tareas de rescate y de reconstrucción la gran oportunidad para recrear nuestra vida en común y darnos un nuevo arreglo institucional que se haga cargo de atajar y revertir la desigualdad, así como de erradicar la impunidad y la corrupción”. 

Porque México padece devastación por el sismo, pero también por “la violencia y sus víctimas, a la inseguridad y sus víctimas, a la injusticia y sus víctimas”, por lo que llamó a “detonar un gran movimiento ciudadano que les arrebate a los políticos el monopolio del poder y lo regrese adonde nuestra propia constitución lo establece: el pueblo”.

Y finalmente llamó a construir un México “en el que, como dicen los zapatistas, quepan todos los Méxicos posibles. Un México de inclusión y justicia verdadera”, para lo cual es importante aprovechar “las tareas de rescate y reconstrucción como un gran proceso de aprendizaje de lo que juntos podemos lograr, actuando con fraternidad, con solidaridad y con generosidad”. 

 

 

 

 

Por una humanidad culta