Rinden en la UAEM homenaje póstumo al filósofo Zygmunt Bauman
Boletín No. 1577
Ciudad Universitaria, 4 de febrero de 2017.
"En México es claro que lo político y el ejercicio del poder están disociados, las decisiones no se toman en la esferas del gobierno, sino en espacios oscuros a los que sólo acceden una cuantas personas”, señaló Julieta Espinosa, académica y filósofa durante el homenaje relámpago en memoria de Zygmunt Bauman.
Este 3 de febrero en la Biblioteca Central de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) se llevó a cabo el homenaje al sociólogo, filósofo y ensayista polaco Zygmunt Bauman, fallecido el pasado 10 de enero y reconocido por acuñar el concepto de modernidad líquida.
Julieta Espinosa dijo que siguiendo a Bauman, "de esta disociación que se ha hecho en los últimos 70 años entre el poder y la política, por un lado se hace la política y por otro se ejerce el poder, surge la necesidad de reunirnos nuevamente, pasar de ser autores a actores, en su obra insiste en la participación para provocar el movimiento de la sociedad”.
Este homenaje dijo, "hace un reconocimiento a quien nos ha enseñado a pensar de otra manera desde hace varias décadas, aunque no fue reconocido sino hasta sus últimos 17 años, y cómo su obra nos permite pensar de manera específica el México que estamos viviendo".
Asimismo, alumnos de maestría y docentes del Instituto de Investigación en Humanidades y Ciencias Sociales y el Centro de Investigación Interdisciplinar para el Desarrollo Universitario de la UAEM, mediante mesas de trabajo y conversatorios, reflexionaron la obra Bauman referente a los conceptos de desecho, utilidad, desperdicio o superfluo.
Los alumnos de posgrado participantes en el homenaje, coincidieron en general, que la noción de desecho en la obra de Bauman está implícito el discurso de la basura y lo desechable, también se opone a lo que es útil, de ahí que somos humanos porque tenemos dignidad.
Reconocido por un enfoque que incorporó filosofía y otras disciplinas, Bauman fue una fuerte voz moral para los pobres y desposeídos en un mundo vencido por la globalización, su enfoque se centró en cómo los seres humanos pueden crear una vida digna a través de decisiones éticas.
Entre sus obras más significativas destacan La modernidad líquida en la que observa cómo el capitalismo globalizado está acabando con la solidez de la sociedad industrial; Amor líquido y Vida líquida, entre otros 50 libros de su autoría que exploraron la fragilidad de la conexión humana en estos tiempos y la inseguridad que crea un mundo en constante cambio.
En la década de 1990, Bauman acuñó el término modernidad líquida para describir un mundo contemporáneo en tal flujo, que los individuos se quedan sin raíces y privados de cualquier marco de referencia predecible.
Por una humanidad culta
